Que crueles son los niños.

Iba por la calle distraída, con los cascos puestos a todo volumen, metida por completo en mis pensamientos. Pensaba en todo y a la vez en nada. Me fijé en tres niños que iban delante mía, uno de ellos, un niño, iba mirando hacia el suelo y los otros dos chicos iban detrás, no sabía de que hablaban, ni si pasaba algo, así que decidí quitarme los cascos y me di cuenta de que el primero niño iba llorando y los otros lo perseguían riéndose de él, le decían que no tenía padre, que lo abandonó porque era tonto y cosas similares, yo sabía algo que esos niños no, el padre de ese chico murió de cáncer al poco de nacer su hijo, pero claro eso no les importa, ellos querían hacer daño. Intervine porque la sangre me hervía y si, amenacé a unos críos. Luego al llegar a casa me puse a pensar y me di cuenta de lo crueles que son los niños y los padres no hacen absolutamente nada y cada vez todo esto va a peor.